DESOLADO


Paradójicamente, la soledad viene acompañada de los buenos amigos. Y es, cuando sientes necesidad del “amor”, cuando éste desaparece… Es incomprensible saber cuándo estarás solo y triste, son sólo malos momentos, pero es cuándo necesitas más. El amor es dar y no esperar eso dicen…
Hoy la soledad viene acompañada de más soledad… Hoy sólo he encontrado refugio en las palabras, aún, ellas no me abandonan en momentos de necesidad… Y espero que no quede poco a poco ciego, para no dejar de escucharlas. Y si así pasará cómo me escucharían ellas. Yo no quiero abandonarlas, no lo merecen me lo han dado todo, compañía simplemente…
Cuan destructiva es la soledad acompañado, cuando crees en la sinceridad, cuando crees en la amistad más que en la carne, y simplemente eres un pedazo de carne con ropas…
La realidad es un pedazo de la vida, la importancia de los que te importan y el momento de que te importen (…)
Desolado simplemente, este espacio aquí y una mano caída… en espera (…) ¿de qué? de soledad. Ya sólo caída sabe esperar, el suelo está más cerca de ser un cándido acompañante, sublime siempre mira hacia el cielo, da esperanza, lugar, compañía, siempre está ahí… El suelo me recuerda a mi hogar, ¿Dónde? No lo sé, pero siempre mira arriba, a mis ojos, a mí. Cuando no hay esperanza, me carga de los pies, nunca está por encima de mis hombros, siempre cerca, cerca (…)
Y hoy simplemente solo…
Una noche,
un día.
El otoño comienza,
y al otro:
otra noche,
y la mañana:
amaneceres y despertares.
Y una noche
una luz,
una estrella fugaz en el viento,
en la luz de otro día,
en la oscuridad de otra noche.