Hay de mí, que un día te maldije. Estaba sonriendo, yo, entre dientes y miradas, injurias replicaba…
Suelo sobornar al sueño con imágenes tuyas, con caricias fallidas, para que no me lleve y me haga presa de su encanto. Lo hago para no olvidarte, temo algún día despertar y pensar que sólo fue un sueño y que sólo existes aquí, en mi mente… Sólo una onda mirada al vacio me resquebraja los parpados como títeres bailando, arriba abajo, arriba abajo, recordándome las sabanas vacias.
inktober: asesinato
Hace 6 años
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